Dado quelos tumores neuroendocrinos (NETs) son tan raros, pueden ser difíciles de detectar y diagnosticar. De hecho, la mayoría de los TNE se descubren de forma inesperada cuando las personas se someten a radiografías o a un procedimiento médico por motivos totalmente ajenos al tumor. 

Si se sospecha de un tumor neuroendocrino, el primer paso será someterse a un examen físico exhaustivo que incluya un examen detallado de sus antecedentes médicos y familiares. El siguiente paso será someterse a pruebas para poder realizar un diagnóstico preciso. Es importante entender que las pruebas que se realicen dependerán de una serie de factores como el tipo de tumor, su localización, si produce un exceso de hormonas, su agresividad y si se ha extendido a otras partes del cuerpo.

Desde el momento en que entre por la puerta de un centro de RMCC para investigar posibles NETs, contará con el apoyo de un equipo dedicado a apoyarle mientras recorre su camino como paciente. Nuestro equipo de médicos entiende que, cuando se trata de NETs, la enfermedad de cada paciente es única. Siguiendo una mentalidad de "pensar como una cebra", nuestros especialistas están preparados para abordar la atención de cada paciente con una perspectiva diferente a cualquier otra que hayan tratado antes. Teniendo esto en cuenta, nuestros clínicos adaptan cuidadosamente el diagnóstico y el tratamiento a cada individuo.  

A pesar de ser difícil, un diagnóstico preciso conduce al plan de atención más eficaz. Los expertos en cáncer de Rocky Mountain Cancer Centers utilizan diversas herramientas diseñadas para diagnosticar tumores neuroendocrinos, evaluar la enfermedad y crear un plan de tratamiento específicamente orientado a sus necesidades individuales. 

Las pruebas diagnósticas que podemos utilizar para diagnosticar los TNE incluyen:

  • Biopsia
  • Análisis de sangre y/o de orina
  • Pruebas moleculares del tumor
  • Ecografía endoscópica
  • Rayos X
  • MRI
  • TAC
  • PET o PET-CT (Galio 68 )
  • Imágenes nucleares (OctreoScan™)

Una vez realizadas las pruebas diagnósticas, revisaremos todos los resultados con usted. Si el diagnóstico es una NET, estos resultados pueden ayudarnos a describir el tumor, mediante un proceso conocido como estadificación. 

La mayoría de los tumores neuroendocrinos se clasifican como tumores de bajo grado por la lentitud con la que crecen, aunque no siempre es así. El grado del tumor y la tasa de crecimiento son factores importantes para hacer un pronóstico y determinar un plan de tratamiento. Sin embargo, cuando se diagnostican y tratan adecuadamente, la mayoría de los pacientes con tumores neuroendocrinos pueden disfrutar de una alta calidad de vida durante muchos años.